El Dakar comienza a volverse más duro y luego de una primera etapa a modo de adaptación, según los propios organizadores, a partir de ahora la competencia aumenta el nivel de exigencia para los participantes, al tiempo que se vuelve más atractiva.
El segundo tramo abarca un total de 782 kilómetros. Para motos, quads y camiones serán 487 kilómetros de enlace, y a continuación 295 kilómetros a velocidad neta. Los autos recorrerán el mismo enlace y transitarán 290 kilómetros cronometrados.
La primera mitad de la prueba del día permitirá un ritmo rápido. Las condiciones del terreno comenzarán a complicarse cuando la caravana alcance la zona de Sierra Nevada, en el sur mendocino, lo que hará que el ritmo disminuya.
El mayor desafío se sitúa en las dunas del Nihuil, donde la arena de tono grisáceo da cuenta de la actividad volcánica allí y la dureza del paraje exigirá al máximo a los competidores, que deberán concentrarse para no cometer errores y sortear esta difícil etapa.