Probablemente uno de los autos más bonitos que nos ha dejado el Japan Mobility Show es el Iconic SP de Mazda, una carta de amor a los verdaderos amantes de los autos y a los que disfrutan de conducir. Esto no lo digo yo, sino que son el sentir de la marca japonesa, que siempre ha apostado por autos que ante todo, sean exquisitos de conducir.
Importante es de señalar que muchos creían que Mazda revelaría una nueva generación del MX-5. No podiamos estar más equivocados.
Su diseño es impactante por lo fluido y simple, con guiños al Mazda Miata original y también, desde algunos ángulos, al RX-7, formas que son enfatizadas por un color muy particular, llamado "Viola Red", un color rojo que casi dan ganas de comérselo por lo brillante y lustroso que se ve. Mazda quiso honrar a este tono de color que ha dado personalidad a tantos de sus autos.
Con 4,18 metros de largo y 2,59 metros entre ejes, es un auto muy compacto, pero que cuenta con mucha potencia, cerca de 365 Hp de potencia generados por un sistema eléctrico de rango extendido donde participa un motor de dos rotores, tal como el que emplea el MX-30 para ayudarse a ganar más autonomía. Además este motor podrá funcionar con hidrógeno o combustibles carbono neutrales. La carrocería si bien no es la más liviana, es equilibrada en una relación 50:50, con un bajo centro de gravedad.
Masahiro Moro, el CEO de la compañía señaló: "Mazda siempre ofrecerá vehículos que le recuerden a los usuarios que los autos son entretenidos y una parte importante de sus vidas. Como una empresa que ama los autos y que produce una experiencia en movilidad inspiradora, nos comprometemos a formar el futuro con los socios que compartimos las mismas metas, así como nuestros fans, donde todos podamos decir ´amamos los autos´. Con ese fuerte deseo, Mazda se compromete a enriquecer la vida en movimiento de quienes servimos."
