Transformar y personalizar un auto es una tarea cada vez más solicitada y en algunos casos es una verdadera obra de arte su materialización. En ese escenario es el que trabaja Singer, una empresa que le otorga un valor extra a modelos que ya son muy aquilatados por sus dueños.
Y su último desafío está enfocado en el modelo Porsche 911 Turbo que ya tiene 50 años de vida. Acá estos modelos se transforman en joyas de colección.
"El 911 Turbo se lanzó hace cincuenta años y desde entonces ha sido un icono, un héroe de las autopistas y un ganador de carreras, adorado por conductores y aficionados de todo el mundo. Estamos encantados de colaborar con los propietarios para celebrar este icono de la carretera y el circuito y desear al 911 turboalimentado un muy feliz cumpleaños.", señaló Rob Dickinson, fundador y presidente ejecutivo de Singer al comenzar con esta tarea en cuatro máquinas que fueron reimaginados para reflejar las preferencias individuales de los coches coupé, se trata de los modelos coupé, slantnose, targa y cabriolet.
Los servicios de Singer reflejan la personalización solicitada por cada propietario al reidear su auto en torno al chasis del Tipo 964. Si bien, del coupé se asignaron 70 unidades, para el desado "slantnose" sólo habrá 25 cupos, todos ya vendidos.
Los autos restaurados están propulsados por una evolución de sus motores Mezger de seis cilindros planos originales. Dos turbocompresores con geometría de turbina variable (tomados del 911 992) e intercooler aire-agua, aumentan la potencia hasta 510 Hp. La potencia se envía a las ruedas traseras a través de una transmisión manual de seis velocidades, con la ayuda del control de tracción y el control electrónico de estabilidad desarrollados con Bosch, y los neumáticos Michelin Pilot Sport 4S.
Cabe mencionar que cada propietario adapta el carácter de su auto hacia una conducción deportiva o de gran turismo, según elija.
Aquí conviene explicar que Singer desmonta todo el auto, y se vuelve a armar, Ahora la carrocería es de carbono, salvo las puertas, y se modifican, cambian, o mejoran los radios y curvas del vehículo. Pero dichos cambios pasan inadvertidos para quién no es un especialista. Es decir, se hace muy difícil saber si el modelo es Singer o el original de Porsche.
